En mi vida, la nutrición juega un papel central, pero también tengo un profundo aprecio por la cocina mexicana y libanesa, así como un amor por las palomitas de maíz, los pueblos pintorescos, el arte del cine, el buen café y sumergirme en las novelas y la ficción. Estar con mi familia y mi perro también me da una alegría inmensa. Sin embargo, mi mayor pasión radica en la nutrición centrada en el equilibrio hormonal, abordando específicamente afecciones como el síndrome de ovario poliquístico, el hipotiroidismo, la fertilidad y la menopausia, así como la resistencia a la insulina.
Hace aproximadamente dos años, recibí mi propio diagnóstico de resistencia a la insulina. Constantemente me sentía fatigada, experimentaba emociones fluctuantes y desarrollé manchas inusuales en mi cuerpo. Después de numerosas visitas al médico, finalmente recibí el diagnóstico. Es alarmante que esta condición común, a menudo pase desapercibida durante las evaluaciones de rutina. La resistencia a la insulina sirve como precursor de la prediabetes y puede ser completamente reversible. Sin embargo, si no se detecta o no se trata en sus primeras etapas, que a menudo presentan síntomas discretos o parecen normales, puede progresar a diabetes y, lamentablemente, no hay vuelta atrás.
Partiendo de mi experiencia personal con el desequilibrio hormonal, mi objetivo durante las consultas es ofrecer comprensión como alguien que ha pasado por un viaje similar. Me esfuerzo por brindar a los pacientes estrategias para adoptar una dieta saludable, incorporando todo tipo de alimentos y fomentando una relación positiva con la nutrición. Además, enfatizamos la importancia de las opciones de estilo de vida, reconociendo que nuestro bienestar general puede afectar significativamente el equilibrio hormonal.
Funcionalmente, nos enfocamos en abordar las causas fundamentales de las afecciones en lugar de tratar únicamente los síntomas. En nuestra búsqueda de un enfoque equilibrado, alentamos a las personas a seguir tratamientos de nutrición terapéutica, comida saludable y comida balanceada, promoviendo hábitos sostenibles y de por vida que prioricen el cuidado personal sin descuidar su conexión con la alimentación, el medio ambiente y el bienestar general.